Cuidado de personas mayores

• ¿Cuál es el nivel de independencia y autonomía que tiene nuestro familiar?

• ¿Necesita cuidado las 24 horas o solamente durante unas horas al día?

• ¿Debemos internarlo, acudir a un centro de día, dejar que se quede en casa?

• ¿Qué coste tiene un cuidador de ancianos?

• ¿Es la teleasistencia una solución adecuada?

Y muchas otras.

Las situaciones personales y familiares son tan variadas que una decisión de este tipo resulta sin duda abrumadora. En muchas ocasiones, la situación está clara, ya que el nivel de dependencia de la persona que queremos cuidar es tal, que nuestras opciones se ven reducidas a escoger entre residencia o cuidador 24 horas.

Pero en muchas otras ocasiones, no existe un nivel de dependencia tan grande. Probablemente a nosotros nos gustaría que nuestro familiar tuviese un cuidado permanentemente, pero no a él, que prefiere mantener su autonomía tanto tiempo como sea posible. Tiene un gran apego a su casa y no quiere que nadie, que no elija él, viva con él y con sus recuerdos.

Por otro lado, los costes de un acompañante 24 horas al día son muy grandes y sólo se justifican cuando son absolutamente necesarios.

La tecnología puede ayudarnos en múltiples ocasiones. Y en el cuidado de las personas mayores también. Habitualmente nos encontramos con soluciones básicas que nos permiten establecer recordatorios, alarmas, o similares.

Además, en caso de recurrir a la teleasistencia, podremos darle un pulsador a nuestro familiar para que lo pulse cuando se enfrente a una situación grave y necesite ayuda.

Estas opciones, aunque muy interesantes, no son suficientes en muchos casos, ya que el nivel de asistencia que prestan dista mucho del cuidado proactivo que asegura que nuestros mayores disfrutan de los mejores cuidados y al mismo tiempo de la mayor autonomía y calidad de vida.